
La joven de 18 años, de quien se omite su nombre por protección dice que acudió a la clínica privada a atenderse con el Dr. Robinson Castillo Ramos y que al este auscultarle sus partes íntimas a modo de examen profesional, este de repente le untó un lubricante, procedió a colocarse un preservativo, le pidió disculpas y le dijo que iba a ser rápido y acto seguido la penetró.
La estudiante dijo que en ese momento entró en pánico y no gritó porque sintió mucho miedo, pero que pocos días despues e lo contó a una sicóloga de la universidad y acudieron a querellarse contra el Dr. Castillo Ramos, quien se entregó a las autoridades.
Le fue impuesta medida de coerción de tres meses con prisión domiciliaria.
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