
Restituyo dijo que de inmediato un equipo de la Policía Científica y del Ministerio Público se dirigieron al vertedero de San Francisco de Macorís en compañía de Martínez, que fue sacado de la Fortaleza Juana Núñez, de Salcedo, y expresó haber tirado dentro de un saco el cuerpo de la menor embarazada de él de cinco meses, pero tras algunos cuarenta minutos de búsqueda en el lugar no encontraron rastros del cadáver.
Decenas de personas al darse cuenta de que las autoridades estaban allí con el confeso asesino acudieron al lugar tratando de linchar al joven que en ningún momento se desmontó de la jeepeta negra donde era trasladado y custodiado y los agentes del orden debieron hacer varios disparos al aire para dispersar la multitud que intentó agredir el vehículo.

La gente de Cenoví, donde reside la familia de la joven, se encuentran de protesta quemando neumáticos y regando escombros en las calles, exigiendo justicia y la pronta aparición del cuerpo de Emely Peguero.
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